5 de marzo de 2016

Hoy puede ser un gran día y mañana también

Continuando con los post basados en el modelo PERMA, hoy toca hablar de “Engagement”.(Éste es otro artículo "a cuatro manos" con Maite Sánchez-Mora (@Maite_San).

Refrescando las ideas que compartimos anteriormente,  vimos cómo este modelo de M. Seligman incluye 5 elementos claves que contribuyen al bienestar humano. Tal como mencionamos, La Ética está implícita en este modelo. Lo demostramos a través de exposiciones y ejercicios, ¡aprendamos haciendo!

Y como ya te hemos ofrecido  ejercicios de la “P” (emociones Positivas), hoy toca hablar de la "E" de  “engagement”.

¿Qué es el engagement? Podríamos traducirlo como compromiso o implicación.  Es un término muy extendido y lo encontramos en distintos ámbitos,   ya sea para definir relaciones de colaboradores en las organizaciones, como de  consumidores y marca;  por no hablar de la fidelización de los seguidores en la redes sociales. Sí, sí, también en este contexto se aplica el término.

De acuerdo con Marisa Salanova  (@MarisaSalanova),  el afecto  positivo facilita conductas que promueven el engagement. La implicación en el trabajo es también una valoración subjetiva; sin embargo,   genera un  placer que se siente a posteriori. Para que esto ocurra, el directivo conoce lo que se espera de él  y tiene la oportunidad de desarrollarlo.

Citaremos muy brevemente que el compromiso tiene una importancia muy relevante en relación al engagement.  De alguna manera es la traducción literal, si bien técnicamente alude a la implicación y entrega.

Una persona puede comprometerse, implicarse y entregarse cuando ha comprendido qué se espera de ella, ha aceptado íntimamente que va a aceptarlo y por lo tanto decide qué va a aportar para conseguir el objetivo que define el compromiso:  conocimientos, tiempo, entrega, etc.  Dedice también qué valores le van a ayudar a conseguirlo: generosidad, confianza en sí, humildad, perseverancia, etc.  

Los valores éticos personales están también presentes en esta experiencia laboral positiva. Los estudios (por ejemplo, los de Walumba) dicen  que los lideres éticos inspiran altos niveles de compromiso y confianza. Se proponen influir en el engagement de los colaboradores  y además son carismáticos, por lo que conviene distinguir los auténticos de los maquiavélicos.

 Lo que es innegable es que es un compromiso de la persona en la empresa a través de su desempeño. Estar conectado al trabajo que se realiza es un primer paso para el éxito, ya que incide directamente sobre la motivación.

Así, el sentirse como   un reto que se es capaz de abordar, es opuesto  al sentir como una carga que hay que soportar. Por lo tanto,  la relación del engagement con el “presentismo” vs “absentismo” es muy estrecha. 

Te dejamos estas reflexiones para que puedas seguir ahondando en tus ejercicios; seguro que ahora verás tus comportamientos desde más ángulos simultáneamente.

¿Quieres repasar cómo explica el profesor Seligman la Psicología Positiva?  Mira este video:

https://www.youtube.com/watch?v=MZKWAW767dA&feature=youtu.be

11 comentarios:

  1. Emilio Moral10/3/16

    Fantástico artículo Edita!!! Me apunto a difundir y promover también el modelo PERMA, si lo aplicáramos todos, otras organizaciones tendríamos!!!
    Emilio Moral

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  2. Miquel Àngel Abril Hidalgo15/3/16

    Gracias por tu escriura tan inspiradora y luminosa. Un placer seguirte
    Miquel Àngel Abril Hidalgo

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    1. Me siento tan honrada y gratificada con tu comentario, Miquel Àngel. Muchas gracias por tu interés.

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  3. ¡Gracias, Edita!No resulta tan fácil explicar qué es el engagement y cómo asociarlo a las prácticas laborales desde la psicología positiva. Un fuerte abrazo

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  4. ¡Gracias, Edita!No resulta tan fácil explicar qué es el engagement y cómo asociarlo a las prácticas laborales desde la psicología positiva. Un fuerte abrazo

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    1. Maite Sánchez-Mora y yo te quedamos muy reconocidas, Julián :-)

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  5. Inara Liepa16/3/16

    Excelente modelo de gestión. Las personas perciben el optimismo que irradia una empresa positiva, el ambiente amistoso y respetuoso les proporciona el bienestar (esforzamos que sea tanto físico como emocional). Si nos enfocamos sobre lo que hacen bien nuestros colaboradores, sobre sus virtudes, sus fortalezas, sin duda conseguimos estimular su creatividad, productividad y satisfacción.
    Inara Liepa

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    1. Paco Corma Canós16/3/16

      Sí Irana, pero el compromiso y la implicación va mucho más allá de lo que solemos entender por "positivismo" o ambientes respetuosos. Es también exigencia, positiva pero exigencia.
      Gracias Edita por compartir.
      Un cordial saludo
      Paco Corma Canós

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    2. Muchas gracias, Inara y Paco, por vuestras reflexiones. Estoy de acuerdo en que enfoques positivos ayudan a que emerja el compromiso, y estoy también de acuerdo con Paco en que el compromiso ha de ser "de doble vía": un buen marco de interrelación en el que quede claro qué aporta cada una de las partes para la buena convivencia y la consecución de los objetivos corporativos.
      Maite Sánchez-Mora y yo os agradecemos mucho vuestro interés :-)

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    3. Maite Sánchez Mora17/3/16

      Muy interesantes aportaciones, gracias :-) Me sugieren que la clave está en ese compromiso e implicación que se localizan en el interior de la persona... mientras la "otra parte" es facilitadora de situaciones para que se cree esa implicación y compromiso. En otro contexto, el compromiso se debe a un sentido del deber, por ejemplo
      Maite Sánchez Mora

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