18 de septiembre de 2024

Divertimento: El desposorio de Don Dinero y Doña Natura

 

Espero que te guste tanto como a mí la obra teatral "La Venganza de Don Mendo"  - la considero una pieza maestra para sonreír un rato -  y de tanto en tanto la disfruto 😍.

Así que he decidido tomar prestado un fragmento y utilizarlo para hablar del lavado verde que practican muchas empresas, añadiendo al final mi reflexión  con una bagatela que se me ha ocurrido. (Espero que seas benevolente, es solo un divertimento).

Este es el fragmento que he escogido de la obra, y me voy a centrar en las reflexiones de doña Ramírez:

 NUÑO (padre) .—

Y don Pero hablóme
y afable y rendido tu mano pidióme,
y yo que era suya al fin contestelle;
y él agradecido besóme, abrazóme,
y al ver el agrado con que yo mirelle
en la mano diestra cuatro besos dióme;
y luego me dijo con voz embargada:
Dígale, don Nuño, que presto mi espada
rendiré ante ella, que presto iré a vella,
que presto la boda será celebrada
para que termine presto mi querella…
Conque, Magdalena, tu suerte está echada,
mi palabra dada y mi honor en ella;
serás muy en breve duquesa y privada;
no puedes quejarte de tu buena estrella

 

MAGDALENA (hija) .— Gracias, padre, gracias.
NUÑO.— Noto tu alegría.
MAGDALENA.— Haré lo que ordenas.
NUÑO.— De tu amor lo espero.
MAGDALENA.— Puesto que lo quieres, seré de don Pero.
NUÑO.— Serás de don Pero. (La besa.) Adiós, hija mía. (Se va por la puerta de la derecha.)
MAGDALENA.— (Aterrada, dejándose caer sin fuerzas en una silla, digo sin fuerzas, porque si se deja caer con fuerza puede hacerse daño.) Ya escuchaste lo que dijo;…

Doña RAMÍREZ.—
Claro está que escuché,
y sólo a fuerza de fuerzas
me he podido contener,
que tal temblor dio a mi cuerpo,
tal hormiguillo a mis pies,
que no sé cómo don Nuño
no lo advirtió, no lo sé.
¡Casarte tú con el Duque
siendo amante del Marqués!…
¡Ser esposa de don Pero
la que de don Mendo es!…
¡Si el marqués lo sabe!…

Doña RAMÍREZ.—
Pues lo mandan, es razón
que sea muda, ciega y sorda,
pero me da el corazón
que aquí se va a armar la gorda.


¡Cuánto me identifico con el razonamiento de Doña Ramírez!  Aceptamos a menudo comulgar con ruedas de molino sabiendo que nuestra pereza y nuestro egoísmo nos pueden llevar a la catástrofe;  como dice Doña Ramírez (que se detiene a pensar sobre las consecuencias de aceptar las cosas sumisamente ), "aquí se va a armar la gorda". 

Así que respondo a  Don Nuño de la siguiente guisa:

Pues héteme aquí

que disfrutándola estaba

y mi mente espoleaba

como enorme borceguí, 

pues de repente entendí

la recóndita soflama

que algunas firmas proclaman

hasta hacerme percibir

lo negro cual verde, ¡intento vil!


Espero haberte provocado una sonrisa que acompañe a una reflexión sobre qué podemos hacer para que Doña Natura no tenga que desposarse con Don Dinero 😉. Y si enriqueces mi bagatela poética será muy divertido y te lo agradeceré.  

Gracias por llegar hasta aquí :)