17 de diciembre de 2014

Semillas de liderazgo


Arte líquido, gestión líquida

Basia Irland esculpe esculturas de hielo en las que aloja semillas.  Una vez realizada la obra de arte, la lanza al río para que, al deshacerse el hielo, las semillas queden liberadas y con posibilidades  de repoblar las riberas del río.  (Tienes un excelente resumen en Allpe Medio Ambiente).

(Y si quieres escuchar el sonido del agua mientras lees puedes pinchar aquí)

Aunque ella lo hace pensando en el medio ambiente, a mí me sugiere el trabajo de una persona que se responsabiliza de los resultados de un equipo de  trabajo, porque tengo la impresión de que ambas actividades tienen muchas cosas en común:

  1. Estudia previamente cuál es la situación del entorno:  cuáles son las plantas  (actitudes,  aptitudes y valores) necesarias para repoblar adecuadamente el hábitat;
  2.  Busca las semillas (repositorios, modelos de aprendizaje, mentores, situaciones, modelos....) que tengan más posibilidades de germinar en ese entorno;
  3. Busca el bloque de hielo adecuado (formato idóneo) para alojar las semillas;
  4. Cincela el bloque de hielo (trabaja todos los recursos) para que resulte práctico y a la vez estético;
  5. Aloja primorosamente las semillas en la escultura de hielo (se asegura de que actitudes y aptitudes serán adecuadamente tratadas en ese contexto);
  6. Lanza la escultura al río (arranca el proceso de acompañamiento / crecimiento de las personas del equipo en el contexto profesional);
  7. Observa cómo navega por el río (por el proceso diseñado);
  8. Interviene si se embarranca, para que pueda seguir su curso;
  9. Contempla cómo el hielo se va derritiendo (se asegura de ir retirando paulatinamente los apoyos brindados);
  10. Admira cómo las semillas se sumergen en las riberas (escudriña en busca de las señales de avance);
  11. Celebra el nacimiento de las nuevas plantas;
  12. Se sienta a la sombra de las plantas adultas para comenzar a diseñar otra obra de arte (recoge aportaciones de las personas del equipo que pueden ayudar a integrar a otras personas).
Responsabilizarse de los resultados de un equipo de trabajo tiene ese toque amoroso que Basia da a sus obras de arte, y es también una obra de arte.

Ver cómo comienza a formarse el equipo, cómo se va consolidando y dando a sus componentes oportunidades de mejora personal y profesional a la vez que se consiguen los objetivos corporativos, genera las mismas sensaciones que tiene que sentir la artista durante su proceso creativo:  sentir que algo vivo, frágil y fuerte a la vez, hermoso, efímero y provechoso está surgiendo, creciendo, consolidándose y dando sus frutos para mejorar su ecosistema.

Y una vez cumplida su misión, se derrite para dejar paso a otra realidad.  Viva, líquida y hermosa.

¿Te parece que simbolicemos todas esas sensaciones con la escultura de una gota de agua?


4 comentarios:

  1. Gracias por regalarnos este artículo, me ha encantado la forma en que nos has sumergido en la historia mezclándola con la gestión de equipos. Buen ejercicio de Storytelling, sí señora.

    Ah, por cierto, quiero que sepas que estoy trabajando con el sonido de agua que nos has compartido, creo que hoy mis resultados laborales van a ser más productivos porque van a fluir como el agua.

    Gracias Edita por enseñarnos tanto

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    1. Gracias a ti, Alicia, por leerla y apreciarla. Ya sabes que me gusta contar historias; y si después alguien las aplaude, miel sobre hojuelas :-)

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  2. A mi también me ha gustado Edita, una manera muy sencilla de cómo llevar a la práctica nuestra responsabilidad.

    Felices Fiestas.

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  3. Muchas gracias, Josep, yo también te deseo unas fiestas felices :-)

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